domingo, 2 de junio de 2013

Mi muerte...


Mi muerte ocurrió por causas naturales.
Cómo era la costumbre, mis familiares me momificaron. Y en cada fiesta mi momia era tratada como si estuviera vivo, se me alimentaba, vestía y daba ofrendas.
Me vistieron con suntuosas mantas y adornos de oro y plata, además de un tocado de plumas y mi escudo de armas.

La ceremonia empezó cuando me encontré con la momia de mi padre Huiracocha en la plaza de Aucaypata.

Mi cuerpo momificado fue colocado en el centro de Tococache (actual barrio de San Blas, en Cusco) en un templo dedicado al trueno que yo mismo mandé a edificar.


No hay comentarios:

Publicar un comentario